Un vistazo al pasado
Cuando era niño, debido a los trabajos de mi padre, mi familia y yo nos mudábamos constantemente a diferentes ciudades, cada aproximadamente 3 años. Esto hacía que fuera muy difícil para mí adaptarme a un nuevo lugar y, al mismo tiempo, dejar atrás a mis amigos. En aquel entonces, no era tan fácil mantener el contacto con ellos como lo es ahora, a través de plataformas como WhatsApp, Facebook o el teléfono.
Recuerdo con tristeza muchos momentos después de mudarme, solitario en una habitación vacía, ayudando a mi madre con las tareas del hogar y sin nadie con quien jugar. A menudo, hablaba en secreto con los perros o gatos, fingiendo que eran mis amigos. Al entrar en la escuela, comenzaba la difícil tarea de encontrar buenos amigos con los que compartir intereses. A menudo, los demás niños tenían recelo hacia mí por ser un extraño con un acento diferente y costumbres distintas.
Aunque estas situaciones nunca cesaron del todo, hoy en día las redes sociales y los medios electrónicos han hecho más fácil esta situación. He creado grupos en estas plataformas que llamo “hijos virtuales”, donde las personas se unen por una misma situación, problemática o interés.
Espero que algunos de estos grupos persistirán con el tiempo, aunque es probable que otros desaparezcan.
“Latinos en Magdeburg”
Antes conocido como “Latinburg aus Magdeburg”, mi primera ciudad alemana de residencia fue Magdeburg. Fue un gran cambio que no fue fácil de asimilar debido a los cambios en el horario, idioma y a mi timidez en ese momento. Estaba tan melancólico que cada vez que conocía a alguien de habla hispana, lo saludaba como si fuera un familiar.
En una oportunidad, recibí una invitación a una cena de parte de una amiga chilena, a la que acepté con gusto. Sin embargo, esa tarde había una tormenta de nieve y los transportes públicos no circulaban. Sin embargo, decidí ir a pie, con un mapa hecho a mano, porque en ese momento no tenía un smartphone o un GPS.
Afortunadamente, con el tiempo, hice muchos buenos amigos en Magdeburg. Debido a eso y también a la falta de un smartphone, creé un grupo llamado “Latinburg aus Magdeburg”. Inicialmente fue pensado para un grupo pequeño de hispanohablantes, pero con el tiempo, se cambió el nombre a algo más genérico debido a que cada vez más personas lo usaban como una plataforma de comunicación. Finalmente, decidí mantener ese nombre porque ayudaba a los hispanohablantes y también a los alemanes interesados en la lengua y cultura hispana a contactarse.
“La Mancha Latina”
“La Mancha Latina” es un grupo de WhatsApp que fue creado inicialmente por un grupo de amigos universitarios en Braunschweig para compartir información sobre exámenes, ofertas de trabajo, fiestas y reuniones latinas, como jugar al fútbol y cocinar juntos. Con el tiempo, el grupo ha ido creciendo y ahora se utiliza para informar sobre conciertos, eventos culturales y promocionar ventas de productos latinos en la ciudad. Es importante destacar que el grupo se ha vuelto público ya que todos los usuarios son administradores y tienen la capacidad de agregar a nuevas personas.
Tanz bei Gaussfriends
Gaussfriends es un club universitario que se enfoca en ayudar a estudiantes internacionales y en promover la cultura. Este grupo internacional, que podríamos llamar así, ofrecía un curso de baile para principiantes, algo que había sido heredado de anteriores líderes. Por ello, creé un grupo de bailarines de ritmos latinos (anteriormente solo salsa), el cual se coordina a través de una lista de correo electrónico. A través de este medio, se informa sobre los cursos de baile y los eventos latinos donde se pueden practicar las habilidades aprendidas.
Este subgrupo, al ser una herencia, lo considero como un hijo adoptivo que me ha dado muchas alegrías y me sigue haciendo todos los martes a las 8:30 pm. Además, cuando coincido con otros bailarines en las fiestas recomendadas a través de correo electrónico, es una experiencia maravillosa.
Mi conclusión
En conclusión, estas iniciativas que se han convertido en plataformas de comunicación han tenido un éxito moderado. Este éxito no se debe a un plan elaborado de marketing, sino a la respuesta a una necesidad urgente de crear una comunidad para informar, ayudar y ser ayudados. Tal vez, en el fondo, buscamos revivir algunos momentos que solo podemos encontrar en nuestra cultura o idioma.
Soy un Expat peruano en Alemania viviendo su leyenda personal. Ingeniero de sistemas de profesión y con pasatiempos interesantes como bloguero, cocinero, fotógrafo y DJ, dejando un pedacito de mi esencia en cada proyecto que emprendo.