Consejos para el Primer Semestre en una Universidad en Alemania

La mayoría de las universidades en Alemania inician el semestre de invierno en octubre, lo que implica que muchos estudiantes nuevos comienzan su bachiller o maestría, ya sea en inglés o alemán. En este artículo, compartiré algunos consejos y advertencias que habría deseado conocer de antemano.

La primera lista de tareas

Si pudiera retroceder en el tiempo al comienzo del semestre, agregaría muchas tareas a la lista que tenía inicialmente para prever algunos problemas que hubiera deseado anticipar. Aquí está mi lista de tareas recomendadas:

  • Unirse a los Grupos de WhatsApp, Drive y Dropbox desde el principio: Es muy probable que alumnos de semestres anteriores compartan resúmenes e incluso exámenes anteriores en estos grupos.
  • Conocer las opciones para imprimir y escanear documentos en la universidad: En algunas universidades, este proceso puede ser complicado. También es útil saber la ubicación de las imprentas cercanas en caso de emergencia.
  • Programar una reunión con el consejero universitario: Solicita asesoramiento para seleccionar las materias del semestre. Algunas materias pueden ser más desafiantes que otras, y las estructuras de materias obligatorias y optativas pueden ser confusas al principio.
  • Registrar las fechas importantes en tu agenda: Esto incluye los plazos para inscribirte en los exámenes y el pago del nuevo semestre. No querrás perder un semestre por olvidarlo.
  • Instalar Microsoft Office original y verificar el acceso a “Statista”: Ambas opciones son gratuitas con tu cuenta universitaria y serán herramientas útiles para tu trabajo académico.
  • Configurar el correo de la universidad en tu móvil: Esto te permitirá recibir las noticias y actualizaciones de tus materias de manera oportuna.

La limitante del Idioma

Los martes participábamos en una entrevista en la universidad y debíamos entregar un resumen por correo electrónico a más tardar a la medianoche del jueves. Cabe mencionar que todo esto se hacía en alemán. En mi caso, y sin exagerar, necesité alrededor de 14 horas para escribir dos páginas en tres días.

Lamentablemente, no obtuve calificaciones sobresalientes, pero me dolió enterarme de que mis compañeros redactaban el resumen unas horas antes de la medianoche y conseguían buenas calificaciones.

En mi opinión, estudiar en un idioma extranjero no es nada fácil, y no tiene sentido planificar el tiempo de estudio o la preparación de un trabajo con el mismo ritmo que los estudiantes locales. Es inevitable asignar más tiempo a todo, al menos al principio, hasta que desarrolles una estructura que puedas seguir. A menos que seas un virtuoso de los idiomas, lo cual, lamentablemente, no fue mi caso, al final necesité 5 horas para el último resumen, cuando finalmente comprendí lo que el profesor esperaba.

Ser organizado

Me resulta curioso escuchar el consejo más obvio: “Sé organizado”, pero muy pocos te indican cómo hacerlo, o muchos creen que ya lo son hasta que llega el momento en que te das cuenta de que organizar la universidad, el trabajo, la vida y los proyectos personales va más allá de la organización que pensabas tener.

Después de esforzarme por completar las tareas antes de los plazos de entrega, he desarrollado algunos hábitos que me han sido de gran ayuda hasta el momento. Estos hábitos se han fortalecido con el uso de aplicaciones como las siguientes:

  • Organización de fechas importantes y recordatorios mediante Google Calendar.
  • Creación de listas de compras, tareas pendientes y responsabilidades del hogar, entre otros, con Keep.
  • Toma de apuntes de datos relevantes que suelo necesitar más adelante con Evernote.
  • Organización de mis proyectos personales a través de Trello.

No hace falta explicar que es recomendable buscar un video tutorial si es necesario para aprender a usar estas aplicaciones. Al hacerlo, en mi opinión, se alivia un poco el estrés y te ayuda a no tener que pensar demasiado en todo lo que debes hacer, sino a concentrarte en lo que has programado para el presente.

Y lo más importante, en mi opinión, es desarrollar hábitos, los cuales se pueden fortalecer con el uso de las aplicaciones que mencioné. Si sientes que no tienes muchos hábitos positivos, te recomiendo leer el libro “Hábitos Atómicos” de James Clear. Puede servir como inspiración y ofrecer una visión más profunda del mundo de los hábitos.

La salud Mental

Durante el invierno en Alemania, con su escasa luz solar y la melancolía por las fiestas navideñas, es normal enfrentar desafíos emocionales. Para sobrellevar esto, he encontrado apoyo en grupos de amigos con intereses similares, como cocina, fútbol y baile. Además, recomiendo llevar un diario de salud mental para reflexionar sobre nuestros pensamientos y emociones diarios, lo que nos ayuda a tener una nueva perspectiva de nuestra situación, esto en lo personal me ha ayudado mucho.

También es fundamental recordar que la depresión puede ser un problema. En caso de enfrentarla, es crucial buscar ayuda profesional, como un psicólogo. Actualmente, existen opciones en línea y en español si no puedes encontrar un psicólogo en Alemania. La salud mental es primordial, y buscar apoyo es un paso importante y valiente.

Hablemos de dinero

Con una visa de estudiante en Alemania, es posible trabajar legalmente hasta 20 horas por semana, aunque existen algunas limitaciones que puedes consultar en el artículo 16 de la Ley de Residencia (Aufenthaltsgesetz). Naturalmente, tus posibilidades de encontrar empleo aumentarán si hablas alemán, aunque en ciertos casos, también puedes trabajar en inglés.

Sin embargo, un tema del que se habla poco, en mi opinión, es la declaración de impuestos, algo que los estudiantes pueden hacer y que puede resultar en un reembolso de dinero, lo cual siempre es útil. Por esta razón, es recomendable guardar todos los recibos relacionados con los gastos de estudio, así como las boletas de pago. Actualmente, existen servicios de declaración de impuestos específicos para estudiantes que pueden ser de gran ayuda en este proceso.

Conclusión

En este artículo, no he intentado ofrecer una fórmula secreta para tener éxito en la universidad, ya que, en mi opinión, no existe una única fórmula mágica. Sin embargo, he compartido lo que, en mi experiencia, hubiera sido útil tener en cuenta desde el principio. Si tuviera que resumir mis recomendaciones en dos palabras, serían “hábito” y “constancia”, te deseo mucho éxito si llegaste hasta aquí.

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